Cuando Brian Cook llegó a la NBA, en 2003 el sueño de papa Norman (ningún parentesco con Fat Boy Slim) se cupliría. Porque el jefe del clan tuvo una experiencia amarga en la liga. Tras pasar una temporada en Boston Celtics (1976/77) con respetables números, no pudo quedarse en la franquicia. Jugó campamentos de verano y fichó en Denver. Pero en los Nuggets jugó sólo dos partidos y fue cortado para nunca más volver. Por eso, más allá de los modestos números de Brian con los Lakers, papá está orgulloso. Lo que se dice una "revancha". Pese a todos los golpes que recibió el plantel, por intermedio de Kobe y la búsqueda de su traspaso, este alero de 2.06m y 113 kilos está iniciando su cuarta temporada en LA. ¿Qué le aporta Cook a Phil Jackson? Jugador de rol 100%, se destaca en defensa y raspa a cualquier "4"; un tipo que juega15 minutos en cancha y que aporta 6 o 7 puntos por juego, un par de rebotes y no mucho más.
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